Santo Domingo de Silos
Hablar del monasterio de Silos es evocar los cantos gregorianos, su claustro y su ciprés. Sin duda alberga otros muchos tesoros, pero esta imagen es la primera que suele llegar al escuchar su nombre.
Existen multitud de construcciones con arquitectura e historia dignas de atención, pero mi interés por las mismas es siempre el telúrico, es decir, las energías que decidieron a sus primeros constructores elegir esa ubicación y no otra para edificar su templo.
El monasterio está situado en la provincia de Burgos, en el valle del Tabladillo. En el recinto actual del monasterio hay dos vórtices de 13500 UB, algunos Puntos de Meditación y un vórtice de 24500 UB. Este último es el responsable, sin duda, de que este lugar fuese elegido para construir la pequeña iglesia prerrománica utilizada por Santo Domingo (en la que se sucedieron varios hechos milagrosos).
Dedicaré mi atención a tres puntos concretos. Hay un Punto de Meditación de 11500 UB dentro del precioso claustro románico, comenzado a construir a finales del siglo XI, que por suerte aún se conserva. Hacia 1885, según testimonio de los monjes, se plantó un ciprés sobre él. Es el famoso ciprés de Silos, inmortalizado en el no menos famoso soneto de Gerardo Diego. No queda constancia de quién lo plantó, pero sí es seguro de que quien lo hizo no lo plantó ahí por casualidad. En la década de los 20 del siglo pasado se plantaron simétricamente con éste otros tres cipreses. Apenas se mantuvieron 30 años dos de ellos, y el tercero se arrancó hacia 1970. Desentonaban, ya que nunca mantuvieron la robustez del que tuvo la suerte de ser plantado sobre el Punto de Meditación.
Dentro de la iglesia nos encontramos con un vórtice de 13500 UB. Se halla en lo que en la actualidad es la entrada principal de la misma; sobre él descansa una pila bautismal románica (que además sirve de pila para el agua bendita). Resulta extraño para todo aquel que accede por primera vez a la iglesia encontrar en su interior junto al portón, la pila bautismal; no es común situarla en este lugar, he visitado infinidad de templos y nunca antes me encontré la pila en esta ubicación. ¿Es señal de que hubo en su momento entre los monjes alguno con sensibilidad radiestésica?
El edificio actual fue construido según proyecto de Ventura Rodríguez en el siglo XVIII, tras decidir los monjes derruir la anterior fábrica románica. El altar mayor se diseñó en el ábside que hoy ocupa la entrada al templo; y en este lugar estuvo hasta que en 1963 se decide cambiar el altar al lugar actual por razones prácticas: la entrada al templo se encontraba en una travesía sin apenas acera y la disposición del altar no era nada práctico para las misas de los monjes; en cambio, la actual situación facilita el acceso de la gente a la iglesia, así como las oraciones de los monjes.
Quiero imaginar que en la iglesia del siglo XVIII, sobre el vórtice de 13500 UB se situaba exactamente en el lugar, tras el altar, desde el cual se oficia la misa, hecho que se repite en otros muchos templos. En la época de la iglesia románica, este lugar coincidía con el ábside izquierdo, que desde su consagración en el año 1080 contó con un altar dedicado a San Martín.
Quiero señalar un aspecto que me parece interesante. Viendo un plano que reconstruía hipotéticamente la iglesia tanto prerrománica como románica, he observado un hecho curioso. La iglesia prerrománica (la conocida por santo Domingo de Silos) fue ampliada por sus lados oriental y occidental, formando así todo el conjunto la iglesia románica. La ampliación occidental guarda la anchura de la iglesia prerrománica, pero no así la oriental; la ampliación oriental es más ancha, pero la parte que se añade de más en realidad se añade por el norte, creando una desarmonía. ¿Qué explicación encontrar? Estoy convencido que hay una, el vórtice de 13500 UB. Si se hubiera mantenido la anchura el vórtice hubiera quedado en el ábside, pero no en el lugar deseado para oficiar la misa, sino casi en el muro (sería inoperativo). Si querían usarlo tenían que hacer lo que hicieron. De aquí podemos sacar una conclusión: El Vórtice Energético ha condicionado totalmente la construcción de esta parte de la iglesia.
El Vórtice Energético de 24500 UB, en la actual iglesia, está situado a la izquierda del altar, en la estancia que hace de capilla del Santísimo. El vórtice se encuentra como a 2 metros del retablo con el sagrario. El retablo se colocó en este lugar en 1990; con anterioridad, frente al vórtice, se encontraba una imagen del Santo Cristo, muy anterior a la iglesia del siglo XVIII, que debió ser muy popular.
Un dato histórico interesante de la villa y alrededores de la población silense es la gran cantidad de ermitas que existían en la época medieval. Algunos documentos hablan de doce, incluso más. No puedo asegurar que todas estuvieran edificadas sobre un Vórtice Energético, pero lo encuentro más que probable.
De las antiguas ermitas que se tiene noticia de su existencia, hay tres que están construidas. La dedicada a San Pedro es hoy la iglesia del pueblo, y tiene un vórtice de 24500 UB. La antigua ermita dedicada a la Virgen del Paraíso es hoy el rehabilitado Convento de San Francisco; en lo que era su iglesia hay un vórtice de 19500 UB. La antigua ermita de San Pelayo, que albergaba asimismo un vórtice de 19500 UB, estuvo sobre lo que hoy es una edificación particular.
También nos quedan restos de otras tres. Dos de ellas bien pudieron con el tiempo quedar en ruina y convertirse posteriormente en tenadas para el ganado hasta bien entrado el siglo XX. Ambas albergaron un vórtice de 19500 UB; se trata de las dedicadas a Santa Bárbara y a la Virgen de la Peña (ésta última en un lugar de no fácil acceso y con una imagen con fama de milagrosa). La tercera ermita estuvo en lo que hoy es el cementerio municipal; dedicada a Santiago, se construyó sobre un vórtice de 24500 UB.
Hay una antigua ermita a unos 3 Km. en dirección Este, que podemos calificar de natural. Se trata de la llamada Cueva del Ángel (probablemente dedicada a san Miguel), de no fácil acceso. La tradición local mantiene que en la época visigoda, cuando habitaban en la zona ermitaños en sus cuevas, esa ermita era el lugar de reunión para la oración. Hay en ella un vórtice de 24500 UB.
Hay varias ermitas de las que ya solamente queda el nombre del lugar y la tradición oral. Estuvieron dedicadas a San Lázaro, a Santa Lucía, a Santa Magdalena y a la Santa Cruz. Cada una de ellas tuvo un vórtice de 13500 UB.
De varias más no puedo asegurar los vórtices que encuentro con sus ubicaciones. Creo que la Radiestesia puede ser útil en determinadas circunstancias para el hallazgo de determinado tipo de yacimientos arqueológicos. Cercano a Silos hay un pueblo llamado Carazo. Sin yo saberlo me enviaron una foto aérea de las afueras del pueblo para prospectar el lugar. Justo donde señalé la existencia de un vórtice de 19500 UB, me informaron después que la tradición mantiene que estuvo un monasterio visigodo.
En un radio inferior a los 2 Km. del pueblo de Silos hay al menos 3 vórtices de 24500 UB, 5 de 19500 UB y 5 de 13500 UB.
Para terminar. A 6 Km. hacia el Oeste del pueblo, se halla la ermita de origen mozárabe de Santa Cecilia. Ha sido calificada como la catedral del Tabladillo, nombre de una aldea medieval ya desaparecida y de todo el valle. No es una catedral ciertamente por sus dimensiones o calidad artística. Pero sí en el sentido de ser el centro espiritual de todo el valle del Tabladillo. Se cree que está sobre construcciones de origen romano. En el museo del monasterio de Silos se conserva un ara romana que sirvió de pie de altar. Junto al mismo se encuentra el Vórtice Energético, en este caso de 24500 UB.
Por último, recomiendo no perderse al menos una de sus oraciones y misas cantadas. El canto gregoriano es sin duda la actual esencia del monasterio. En éste la calidad biótica en los lugares neutros es de 7800 UB. Los cantos a los que asistí duraron 30 minutos. A los 5 minutos empezó a sentirse cómo la densidad energética aumentaba en el templo; a los 20 minutos en el altar se registraban 9000 UB, y junto a la salida 8500 UB; a los 30 minutos, 9400 UB, en el altar, y 8800 UB en mi posición. En el interior de esta iglesia, como en las demás, se detectan las redes Hartmann y Curry; medí una línea Curry: 5900 UB al comenzar, y a los 20 minutos 7600 UB.
Cuentan los monjes, como anécdota, que si los niños se duermen, es señal de que han cantado bien. Creo que no resulta difícil relajarse con sus cantos.
Ya en casa, decidí repetir el experimento con un CD de canto gregoriano. Pasados 75 minutos, la habitación donde realicé el experimento registraba una medición de 9900 UB en los lugares neutros. Al apagar la música, comenzó la cuenta atrás en la restauración de los niveles normales, a las 3 horas la medición era la habitual, 7600 UB.
De este estudio se puede concluir que este canto resulta ideal para relajarse, meditar y crear un ambiente con mayor densidad energética, algo tantas veces buscado.
Epifanio Alcañiz
Investigador de las energías telúricas
