Ermita de San Bartolomé
En el pueblo de Ucero (provincia de Soria), en el parque natural del cañón del río Lobos, podemos visitar esta ermita construida por los templarios. Según alguna teoría, fue enclave central de los asentamientos templarios en la Península Ibérica; puede ser correcta esta teoría, pero sobre este tema no voy a opinar.
Antes de visitar un lugar con una cierta importancia telúrica, lo prospecto desde casa antes de ir, por dos razones: una el saber de antemano qué es lo que puedo encontrar, y otra comprobar si las respuestas han sido acertadas.
Ya de antemano sabía que encontraría un Vórtice Energético de 24500 UB, con su correspondiente Octógono Radiante, y un Ángulo Sacro en su altar. A estas dos alteraciones juntas las he bautizado con el nombre de Enclave Espiritual, por una sencilla razón: simplificar. Para mí es mucho más sencillo cuando voy a entrar en un templo el preguntar “¿hay un Enclave Espiritual en esta iglesia?”, y si realmente lo hay prospectar después cada uno de sus Vórtices Energéticos.
Sólo por el encanto paisajístico del lugar, merece la pena visitarlo. Después de un paseo siguiendo el cauce del río, se ve la ermita. He de reconocer que el edificio del siglo XIII, y su situación, debería haber ocupado mi atención al avistarla. Sin embargo, no fue así; hubo algo que se fijó en mi retina, y me hizo desear el llegar pronto al lugar para poder prospectarlo.
Sigamos con la ermita. La construcción tiene forma de cruz latina, y su altar (situado en la cabecera de la misma) apunta hacia el Este. Todas las iglesias que yo he visitado y cuentan con un Ángulo Sacro se encuentran perfectamente alineadas con los puntos cardinales, el eje de su nave apunta al este situando su cabecera en esa orientación y el Ángulo Sacro se sitúa en el altar mayor, su vórtice central tras el altar en el lugar desde donde el sacerdote oficia la misa, el vórtice más cercano se solía situar justo delante del ambón o atril de lecturas, que dependiendo de su forma podría ir en una iglesias en la zona del evangelio y en otras en la zona de la epístola, en algunas de las iglesias, no en todas, el vórtice más separado coincidía con el púlpito, como en el caso de esta ermita, tres puntos energéticos situados estratégicamente para exaltar y potenciar la espiritualidad del oficiante. Hay un Vórtice Energético de 24500 UB, con su Octógono Radiante, que se sitúa justo donde está colocada la imagen de la Virgen de la Salud. El vórtice está frente al comienzo de la plataforma, la unión de estos cuatro vórtices es lo que yo he denominado Enclave Espiritual.
Además hay otros dos Vórtices Energéticos de 13500 UB. Uno está situado frente a la puerta a la izquierda, justo delante de la concha destinada a recoger el agua bendita; curioso, porque en todas las iglesias esta pila se encuentra junto a la puerta, y en ésta se sitúa en la pared de enfrente, es decir se pretendía con esto que aquel que se acercase a esta pila se beneficiase de esta energía. El otro se localiza en la parte trasera de la ermita, en la pared de la puerta oeste, subiendo unas escaleras de piedra, arriba, a medio metro del último escalón pegado a la pared.
Lo que no encontré en esta ermita es la forma octogonal en algún elemento de la construcción. Esto me extrañó, porque deja un poco de lado mi teoría de que era una marca para señalar que en ese lugar había un Octógono Radiante.
Vayamos con lo que llamó mi atención desde el principio y que prospecté antes de entrar en la ermita. Junto a ésta, hay tres inmensos troncos secos (centenarios sin duda); uno de ellos, víctima del leñador, se encuentra abatido. Resulta curioso observar que ningún árbol del entorno tiene una envergadura similar a estos.
Los dos más gruesos, los que aún se conservan en pie, están situados justo en un vórtice de 19500 UB; y, aproximadamente, en la mitad del tronco caído hay otro vórtice de 19000 UB (registro que, hasta ese día, yo no tenía catalogado). Los Vórtices Energéticos de 19500 UB se dan en una línea Curry sobre cruce Hartmann normal, en el de 19000 UB una de las líneas Hartmann es de primer orden. Aunque no encontré el tocón de árbol caído, estoy convencido de que se situaba justo en el Vórtice Energético.
Ésta es una de las muchas sorpresas que creo me restan por vivir. No pensé que se pudieran encontrar tres de estos vórtices tan cercanos entre sí, y además junto a un Enclave Espiritual. El conjunto confiere una actividad telúrica que no creo que se repita muchas veces en todo el planeta. La respuesta que obtengo es que hay un total de tres incluido éste. Sin duda este en un Lugar de Poder importante.
Estos troncos pertenecen a centenarios olmos que perecieron cuando en los años 80 la grafiosis secó todos los olmos de Soria. Para mí no sería descabellado pensar que pudieron ser plantados por los caballeros templarios. Sea de esta u otra forma, éstos, realmente serían unos árboles sagrados en los que abrazarse o apoyar las manos sobre su tronco recargaría de energía espiritual a quienes los plantaron. Lo que sí es seguro es que no crecieron allí por casualidad.
Epifanio Alcañiz
Investigador de las energías telúricas
